domingo, 6 de octubre de 2013

Saudade de você

Los años nos roban muchas cosas. Aportan otras, claro que sí, pero nos roban algunas de las más importantes.
Nos quitan ilusión, nos roban los sueños, nos apaga la energía, y nos esconde las sonrisas.
Y quizás eso sea lo más triste, que se van borrando sin darte cuenta. Sí, quizás sonreímos a diario, tal vez por inercia, o porque tenemos la suerte de tener cerca a alguien que nos hace sonreír.
Pero nuestra sonrisa ya no es como era antes.

Aparte de eso, ¿y las risas? ¿Dónde quedaron esas risas? Aquellas carcajadas que nos daban dolor de barriga, y que nos llenaban de alegría.

Tal vez sea yo, tal vez me gustaría sonreír más aún, y mira que creo que soy de ese clan afortunado que tiene la sonrisa por bandera. Pero echo de menos tantas cosas... tengo saudade de você. De ese amigo con el que tenía charlas infinitas sin sentido (o con muchísimo sentido), de ese grupo con el que tomar algo en una terraza un día cualquiera, en cualquier lugar, con cualquier excusa, de los domingos de fútbol en compañía.

Tengo nostalgia de lo vivido, que ha sido mucho. Y no porque lo actual sea peor (que creo que es justo lo contrario), sino porque todo ha sido tan bonito, y se ha ido tan rápido...

Se han borrado tan rápido las sonrisas de los 18 años de las fotos. Que ahora nos miro a la cara y veo solo las arrugas. El paso del tiempo, y los ojos de no haber dormido. Pero ya no hay resacas, ahora hay lloros de los bebés, y padres, que son amigos también, pero que no tienen horas para que el día les cunda.

La vida es preciosa. La vida que hoy me toca vivir es maravillosa. Y sé que dentro de un tiempo volveré a escribir en mi blog una entrada que se llame "saudade de você", y ese você será otro bien distinto. Será este tiempo actual. Será el día de hoy...