domingo, 4 de diciembre de 2011

Mi nueva habitación



Mi nueva habitación no tiene recuerdos. Es nueva. Y por eso aún no tiene recuerdos.

Tiene cuadros nuevos, algún cuadro que nunca llegué a colgar, y dos cuadros regalados.

Tiene mi viejo ordenador y una vieja tele. Y muchos libros, un armario, algún mueble, y fotos de familia.

Es mi cuarto, tan personal e impersonal a la vez. Una habitación a la que los días le van dando forma y fondo.

No tener trabajo hace también que haya pocos recuerdos. Mi nuevo estilo de vida evita los recuerdos. La ausencia que he comentado de fotos oculta esos recuerdos. Y mi cabeza, mi cabeza es la que más lucha contra el pasado.

Dicen que somos todo lo que hemos ido siendo en nuestro pasado. Eso nos va conformando de una u otra manera. Supongo que es cierto, pero el caso es que ahora mismo, en esta fría noche de diciembre, no quiero ser parte de mi pasado. Quiero solo pensar en el futuro, y seguir cada día sintiéndome mejor, como hago estos últimos días. Riendo por fin. Y sin pasado. No quiero ser la Diana de ayer, de hace una semana, ni la de hace un mes, y mucho menos la de hace un año. Mi pasado es mi pasado, ya fue. Hoy no lo quiero, hoy no me sirve para avanzar.

Sé que dentro de un tiempo viajaré de nuevo al pasado. Recordaré con gusto, con alegría, ya he pasado por esto. Sé que en el camino siempre se suelta lastre, aunque sea doloroso, pero las nuevas vidas siempre provocan pérdidas. No puedes ganar una guerra sin luchar, e incluso perder, alguna batalla.

He perdido muchas batallas estos meses. Quizás más que en toda mi vida anterior. Así que toca recapitular.

Me rindo. Perdí. Y ahora quiero luchar de nuevo en otra guerra. Una guerra de mí contra mí. Sin más enemigos. El pasado ha muerto de momento. Porque sin matar a ese pasado no crearé un futuro adecuado.

La vida es muy larga. Y la experiencia me dice que a veces hay que olvidar el ayer, dar dos pasos hacia atrás, coger carrerilla, tomar aire y saltar. Muy alto, muy lejos, con un grito y ganas de comenzar.

Estoy empezando algo muy grande, lo más grande: estoy empezando mi futuro. El primer día del resto de mi vida. Es también el primer día del resto de vuestras vidas. No lo olvidéis.

"Puedes olvidarme para toda la vida, olvidar que también hubo alegrías".


2 comentarios:

  1. Tú lo has dicho, y aunque quizás ahora mismo no lo creas mucho: la vida es larga, te quedan muchas habitaciones que llenar de cosas, de vida...
    Para mi es duro el lugar, porque para mi los lugares significan muchísimo, y siempre he necesitado sentirme en casa, sentirme en mi habitación... pero ese soy yo, el mismo que te dice que también está empezando su futuro :)
    Vamos a empezar uno grande y bonito... que ya que nos ponemos :)

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  2. El futuro siempre trae todo aquello que tú quieras. Los pasos hacia atrás, todos los que necesites para coger mucha carrerilla y subir este 8000 que tienes en frente. Eso sí, con toda la gente que te queremos a tu lado subiendo hasta el pico más alto. Cuando lleguemos disfrutaremos de la nueva brisa. Luego llegará la bajada y a disfrutar.

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